En el campo de la dosificación podemos destacar dos posibles sistemas: volumétricos o gravimétricos.

Volumétricos
Los diferentes equipos ideados para el transporte de materias primas se dividen en 2 tipos según la concentración de producto en la corriente de aire:
‐ Molturación:
Molinos de martillos, pitones, etc, para molturar todo tipos de productos con granulometrías inferiores a 1 mm.
Turbomolinos con certificación ATEX para la obtención de azúcar glaçe.
Caudales hasta 30.000 kg/h en función de la granulometría final.
‐ Rompe‐terrones:
Equipos de un eje o dos ejes para triturar productos apelmazados formando grandes terrones. Granulometría resultante entre 2 y 10 mm, según el tamaño de malla. Caudales hasta 2.000 kg/h en función de la granulometría final.
‐ Micronización:
Molinos para poder obtener productos con granulometrías inferiores a 50 micras.

Micro‐dosificación
Los sistemas de micro‐dosificación se aplican en aquellos componentes que se manipulan en cantidades inferiores a 1 kg. Normalmente se aplican equipos gravimétricos, por sus ventajas.
Existe la posibilidad de utilizar básculas individuales por componente o básculas multi componentes según las precisiones requeridas o problemáticas de contaminaciones cruzadas (productos alérgenos).

Gravimétricos
Mientras que en los sistemas gravimétricos utilizamos sistemas de pesaje con células de carga para controlar la cantidad de producto en peso. Estos sistemas presentan una serie de ventajas:
Aplicable a productos e ingredientes de difícil manejo ya que no existe contacto directo con el equipo de medición.
Los sistemas de pesaje se pueden aplicar a una amplia gama de depósitos y básculas, con diferentes geometrías y capacidades.
Sistemas higiénicos, en cumplimiento de normativas.
Facilidad de limpieza al no haber contacto con los productos.
Mayor precisión en la dosificación, al estar midiendo la masa de producto directamente, no se deben aplicar factores de corrección.
Automatización completa de la instalación mediante equipos locales programables o sistemas de control centralizados.
Algunos de los parámetros por los que se puede seleccionar un equipo son: montaje horizontal o vertical; disponer de diferentes elementos internos de mezcla (cintas, de tornillo, de arado, etc.); capacidades de mezclado, velocidad de mezclado, etc.
Diseño de equipos de diferentes capacidades, materiales y certificación ATEX.